Derrota histórica para Israel: La CIJ dictamina que es plausible que Israel esté cometiendo genocidio

El pueblo palestino pide que se ejerza la máxima presión para detener el genocidio y desmantelar el apartheid.

Actualización

La presión aumenta sobre CAF para que se retire de la construcción del tranvía ilegal de Israel que conecta asentamientos

La empresa vasca CAF tuvo que enfrentar a protestas online y en la calle y a críticas desde el accionariado durante su junta general de accionistas.

La junta general de accionistas de la empresa vasca de transportes Compañía Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) que se celebraba online el 13 de junio fue objeto de protestas online y en la calle frente a las oficinas de la empresa en Beasain y de críticas desde el accionariado, todas ellas, exigiendo la retirada inmediata de CAF de su implicación en crímenes de guerra israelíes. El año pasado CAF ganó el contrato para el proyecto ilegal del tren ligero de Jerusalén (JLR) cuyo objetivo es hacer permanente los asentamientos ilegales israelíes y facilitar la anexión de territorio ocupado palestino.

Miles de personas alrededor del mundo han hecho un llamamiento a CAF en las últimas semanas a “bajarse del tren del apartheid israelí”. Amnistía Internacional España y EH Bildu, el segundo mayor partido político en Euskal Herria, se han unido a las protestas contra CAF.

En el Reino Unido, defensores de los derechos humanos están presionando al gobierno para que excluya a CAF de un contrato muy lucrativo para la construcción de una línea de tren de alta velocidad británica por el apoyo de CAF al negocio de los asentamientos israelíes.

Mientras CAF celebraba su junta general de activistas cien personas incluyendo trabajadores de CAF se juntaron en la calle delante de la sede de la empresa portando banderas palestinas y pancartas de la campaña.

Asier Álvarez Mujika, uno de los organizadores de la protesta de la coalición “CAF: Bájate del tren del apartheid israelí” dijo:

“Cientos de organizaciones y miles de personas incluyendo las propias trabajadoras de CAF están denunciando la complicidad de CAF en los crímenes de guerra de Israel. Mas allá de las fronteras de Euskal Herria y del Estado español activistas alrededor del mundo están participando en la campaña para excluir a CAF de grandes licitaciones hasta que deje de sacar un beneficio de manera descarada de la ocupación y opresión israelí del pueblo palestino”.

La dirección de CAF claramente no quería tener que responder públicamente las preguntas de un accionista de CAF sobre la ilegalidad de la JLR que arrojaría luz sobre prácticas comerciales poco éticas y tendría consecuencias financieras para la compañía.

El accionista, Santiago González dijo:

“CAF impidió que compartiera mis críticas de este contrato ilegal que saca beneficio de la negación israelí de los derechos humanos palestinos. El consejo de derechos humanos de la ONU ha condenado el tren ligero de Jerusalén por ser una violación del derecho internacional, pero CAF, de manera absurda, alega que “asesores de la ONU” hayan dicho que no es así. Ahora que ha empezado el trabajo de construcción sobre el terreno CAF se enfrentará a una presión cada vez más intensa en varios países para excluirle de los procesos de licitación por su complicidad en los crímenes de guerra y apartheid israelíes”.

Entre las organizaciones que han hecho un llamamiento a CAF a retirarse del proyecto de JLR se encuentran sindicatos relacionados con CAF, el comité de empresa de CAF en Beasain e Irun, colectivos y organizaciones vascas y alcaldes locales.

En las últimas dos semanas, más de 3.000 personas han enviado correos electrónicos en inglés, castellano y euskera a Andrés Arizkorreta, presidente y consejero delegado del grupo CAF, cientos de personas han hecho llamadas telefónicas a oficinas de CAF pidiendo que “CAF anule de inmediato su contrato por el tren ligero de Jerusalén”. El hashtag de la campaña llegó a más de seis millones de personas via twitter.

Cientos de personas mandaron selfies por twitter con mensajes exigiendo la retirada de CAF del JLR entre ellas la periodista Teresa Aranguren, el presidente del instituto de derechos humanos de Catalunya David Bondia, el director galardonado de cine Julio Pérez del Campo, el corredor de montañas de élite Javi Dominguez, el actor vasco Gorka Otxoa, el europarlamentario Manu Pineda y la portavoz de Podemos en la asamblea de Madrid Isa Serra.

Entre los sindicatos que han mostrado apoyo a la campaña están STEILAS Sindikatua, el sindicato de educación más grande de Euskal Herria y LAB, ELA y ESK, todos sindicatos con miembros dentro de CAF.

El conocido cantante vasco Fermín Muguruza sacó con Sr. Wilson una canción, pidiendo que CAF dejase de trabajar en territorio ocupado palestino. Muchas artistas, tales como Tasio, se han unido a la campaña aportando diseños pidiendo que CAF abandone el proyecto ilegal de Israel.

Antecedentes

En agosto de 2019 el consorcio de CAF y la empresa constructora israelí Shapir fue seleccionado por el ministerio de finanzas de Israel para encabezar el proyecto valorado en 1,8 mil millones de € para ampliar la red de tranvías que une los asentamientos ilegales de Israel en territorio ocupado palestino.

El negocio israelí de asentamientos se considera un crimen de guerra bajo el estatuto de Roma del tribunal internacional criminal (ICC). El proyecto JLR viola el derecho internacional porque refuerza el control israelí sobre tierras ocupadas palestinas incluyendo Jerusalén Este. Con su participación CAF contribuye a las graves violaciones israelíes del derecho internacional y de los derechos humanos palestinos. Shapir, el socio de CAF, se encuentra, además, en la base de datos de la ONU de empresas que colaboran en el negocio ilegal de los asentamientos.

El JLR es tan burdamente ilegal que otras multinacionales como Alstom, Siemens, Systra, Bombardier y Macquarie, que habían participado en las etapas iniciales del proceso de licitación del proyecto, se retiraron dejando a solo dos consorcios en la presentación de ofertas.

La empresa francesa Veolia se vio obligada a retirarse del mismo proyecto ilegal del JLR en 2015 después de perder miles de millones de dólares en contratos internacionales debido a una campaña duradera de BDS en Europa, EEUU y varios países árabes.


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